lunes, 08 de febrero de 2010
General Acha (A) - La concejala Nelly Mena (PJ) salió al cruce de comentarios sobre su ausencia en la sesión extraordinaria del Concejo Deliberante en cuyo transcurso se dio un no rotundo a la instalación de la fábrica de clorosoda en esta ciudad. Recién llegada de viaje, comentó que “teniendo contratado y pago un viaje, no podía ni quise desistir de él. El domingo pasado me enteré que el presidente del cuerpo se había comprometido a llevar a cabo la sesión extraordinaria durante esta semana, por lo que al ausentarme ese mismo día redacté una nota para informarle de la imposibilidad de asistir, que fue ingresada el lunes a primera hora por mi hijo”.
“Mi posición con respecto al tema era conocida por todos y mi voto, si asistía, era por la abstención, ya que yo sigo creyendo en mi Gobierno, tanto provincial como municipal. En la reunión que se llevó a cabo en el Ministerio de la Producción, a la que Acha sin Contaminación fue invitada pero no concurrió, se estableció que si el análisis de impacto ambiental arrojaba riesgos de contaminación, el Gobierno la seguiría apoyando pero para autorizar su instalación se debía realizar una audiencia pública y, acorde a sus resultados, obrar en consecuencia. Como el análisis del impacto ambiental aún no llegó y en consecuencia la audiencia aún no se llevó a cabo, sigo creyendo en el Gobierno”, expresó.
“¿Cómo se puede convocar a una sesión extraordinaria en forma tan urgente, si aún no estaban realizados los pasos más importantes que debían cumplirse sobre ese tema? Además, mi nota entró con anterioridad a la convocatoria de la sesión, bien podía el señor presidente (por Berot) haber convocado al primer concejal suplente en mi reemplazo”.
“De haberse cumplido todos los pasos legales para determinar si la industrialización de los productos de FIASA o de cualquier otra empresa fueran positivos (contaminantes), jamás apoyaría algo que pudiera perjudicar la salud de los vecinos o que pudiera perjudicarlos, de eso se pueden quedar tranquilos”, sostuvo.
Por último, indicó que en el caso de que la intendenta vete el proyecto y éste vuelva al Concejo, mantendrá su postura “porque mis códigos y mi cintura política así lo obligan” y negó que hubiese sufrido presiones para adoptar una posición favorable a la radicación.
Fuente:Diario El Diario 8/02/2.010
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